miércoles, 16 de marzo de 2011

Sarampion

¿Qué es el sarampión?en directorio de la a a la z de entorno medico
El sarampión es una infección aguda exantematica, es una virosis humana para la que hay una susceptibilidad universal y que ataca toda la economía. Es mucho más frecuente en niños pequeños. Es contagiosa y su periodo de mayor contagiosidad es durante la etapa anterior a la erupción, pero continúa en tanto permanezca el exantema.

¿Qué la ocasiona y como se contrae?

La infección del sarampión está dada por un virus (mixovirus) trasmitida por la inhalación de gotitas infecciosas.
El mixovirus contiene RNA, es de forma esférica y tiene un diámetro de 120 a 150nm, sin variantes antigénicas relacionado al virus que produce el moquillo en los perros. El virus es frágil a las variaciones de temperatura, humedad, iluminación y se inactiva con la mayoría de los agentes desinfectantes.
El sarampión es endémico-epidémico en poblaciones de más de 300 mil habitantes. Pero para mantener la endemia debe de disponer de individuos susceptibles cada 14 días o 26 casos consecutivos por año, que serían las condiciones ideales de transmisión. El periodo de incubación es de 10 a 11 días.
El contagio es muy alto, ya que bastan unos cuantos minutos para contraer la enfermedad por gotitas de Flügge procedentes de las secreciones nasofaringeas de los enfermos al hablar, toser o estornudar.
La población más susceptible es la escolar y preescolar y también es más grave es estos que en los escolares y adultos jóvenes.

SÍNTOMAS

La patogenia de la enfermedad inicia cuando el virus llega a la mucosa nasofaringea a través del aire, lugar en que se reproduce invade los ganglios regionales. Al segundo día una viremia transporta los virus a los órganos linfoides y al epitelio del tracto respiratorio, lugar en el que nuevamente se reproduce y aparecen células gigantes(3-5° día).
Al sexto día se presenta la viremia secundaria y al séptimo se inician las lesiones en la piel. Para el 11º día comienzan los prodromos y al catorceavo aparecen las lesiones cutáneas y se pueden titular anticuerpos séricos.
En el 15º día encontramos que desaparece la viremia y disminuye el contenido viral en los órganos infectados. Y por último al 17º día se aprecia mejoría e inicia la desaparición del exantema.
Podemos dividir al sarampión en dos etapas: que son la fase preeruptiva y la eruptiva.
La fase preeruptiva se inicia con los pródromos y se caracteriza por fiebre elevada, malestar general, catarro oculonasal (conjuntivitis casi siempre parpebral y en ocasiones hemorragias en los párpados inferiores en los casos graves) y tos seca. Un porcentaje que varia de 50 a 80% se pueden encontrar las manchas de Koplik, que son pequeños puntos blancos de 1-2 mm rodeados de eritema en la cara interna de las mejillas a la altura del 2º molar, los cuales desaparecen al 3er día de haber brotado el exantema.
En la fase eruptiva se presentan el exantema que son elementos maculoeritematosos detrás de los pabellones auriculares, que se extienden a la frente y cara para posteriormente continuar en dirección cefalocaudal. Las manchas se borran con la presión. Al tercer día la erupción palidece y se torna pardusca al cuarto día, en esta fase las manchas ya no se borran con la presión y tienden a descamar.
La fiebre, la postración y el malestar general disminuyen de 2 a 3 días después de que brota el exantema, presentándose una mejoría general.
Las complicaciones del árbol respiratorio son neumonías, bronquitis graves, bronquiolitis y laringitis.
Cuando el sarampión evoluciona sin presentar exantema la mortalidad alcanza cifras de 80-100%

TRATAMIENTOS Y RECOMENDACIONES

A la exploración radiológica del tórax se aprecia un infiltrado. También es clásico encontrar un deterioro nutricional, lo que quiere decir que en el laboratorio encontramos un balance nitrogenado negativo con diminución de los niveles de albúmina sérica.
El diagnóstico realmente sé estable en la gran mayoría de los casos con base a datos clínicos y epidemiológicos.

TRATAMIENTO

No existe un tratamiento especifico, por lo que los pacientes infectados deberán de recibir un manejo de apoyo, tratando de prevenir las complicaciones.
Para la fiebre se utilizarán antipiréticos o medios físicos, para la tos antitusivos no-codeinicos.
En caso de complicaciones neumónicas el tratamiento de elección es la penicilina G a razón de 50,000 u/kg día durante 5-7 días.

PREVENCIÓN

Ésta se consigue con la aplicación de vacuna de virus vivos atenuados al año de edad y se repite la dosis como refuerzo un año después. La vacuna de virus atenuados y en especial las cepas Schawars y Hileman, inducen a la producción de anticuerpos en por lo menos 97% de los niños

Rubeola


La rubéola (sarampión de 3 días) es una infección vírica contagiosa que produce síntomas leves, como dolor en las articulaciones y erupciones. La rubéola es menos contagiosa que el sarampión y muchos niños nunca llegan a contagiarse. No obstante, la rubéola es grave, sobre todo para las mujeres embarazadas. Una mujer infectada durante las primeras 16 semanas (particularmente las primeras 8 o 10 semanas) de embarazo puede abortar, dar a luz un bebé muerto o tener un bebé con defectos congénitos. Aproximadamente del 10 al 15 por ciento de las mujeres adultas jóvenes nunca han tenido la rubéola, por lo que pueden correr el riesgo de tener hijos con graves defectos congénitos si se infectan al comienzo del embarazo.
Las epidemias ocurren en intervalos irregulares durante la primavera. Las mayores epidemias ocurren cada 6 o 9 años. En los países desarrollados actualmente el número de casos es menor que nunca. Un único ataque de rubéola inmuniza a la persona de por vida.

Causas

Se transmite entre personas a través de estornudos, tos o el contacto con superficies contaminadas (pañuelos, vasos, o manos). La posibilidad de que una persona no vacunada adquiera la enfermedad si convive con alguien que la tiene es del 90 por ciento. Cuando el virus se introduce en el organismo, pasa a la sangre atacando a los glóbulos blancos, que a su vez transmiten la infección a las vías respiratorias, la piel y otros órganos. Una vez que se padece la enfermedad, el paciente adquiere inmunidad permanente, por lo que no vuelve a ser atacado por el virus. Un bebé infectado antes del nacimiento puede ser contagioso durante muchos meses después de nacer.
El periodo de incubación de la enfermedad (tiempo que transcurre desde que se entra en contacto con una persona enferma hasta que comienzan a desarrollarse los síntomas) suele oscilar entre dos y tres semanas. A su vez, una persona infectada por el virus de la rubéola puede transmitir la enfermedad a otras personas dos días antes de que los síntomas se muestren, no desapareciendo el riesgo de contagio hasta una semana después de la aparición de los signos de la enfermedad.

Síntomas de Rubéola

Los síntomas comienzan entre los 14 y los 21 días después de la infección. La rubéola se caracteriza por la aparición de pequeñas erupciones en la piel de un color rosáceo que se inician en la cabeza y progresan hacia los pies, haciéndose más intensa en el tronco, que no provocan picores ni molestias y suelen desaparecer en pocos días. Las erupciones suelen mostrarse uno o dos días después del contagio. Junto a las manchas rojizas, los síntomas de la rubéola son bastante similares a los de un síndrome gripal, con malestar general, fiebre poco intensa, enrojecimiento de los ojos, dolor de garganta (faringitis) e inflamación dolorosa de ganglios alrededor de la nuca y en la región posterior de las orejas.
Mientras que en los niños la rubéola suele revestir escasa gravedad, acompañándose algunas veces de otitis (infecciones de oídos), es más frecuente la complicación de la enfermedad entre los adultos que la padecen, que pueden sufrir otras patologías más graves provocadas por bacterias, como neumonía o encefalitis (en uno de cada 1000 casos). Esta última consiste en una infección que afecta al cerebro y conlleva un riesgo inmediato de coma, retraso mental a largo plazo, epilepsia e incluso muerte del paciente.

Prevención

La vacuna triple vírica, que protege frente a la rubéola, el sarampión y las paperas, se muestra eficaz en casi la totalidad de las personas a las que se le administra. Es una vacuna combinada que se recomienda en la niñez. Es aconsejable administrar la primera dosis cuando el niño cumple 15 meses, aunque en algunos casos no proporciona la inmunidad adecuada, por lo que se suele facilitar una segunda dosis antes de la escolarización (entre los cuatro y los seis años) o antes de la adolescencia (entre los once y los trece años). En cualquier caso, también se recomienda la vacunación en personas adultas que no recibieron la inmunización durante la infancia.

Diagnósticos

El diagnóstico se basa en los síntomas típicos. Sin embargo, muchos casos de rubéola se diagnostican erróneamente o son leves y pasan inadvertidos. Es difícil su diagnosticación ya que las erupciones en la piel suelen ser poco intensas y de escasa duración. No obstante, se puede conocer mediante un análisis de sangre si la persona ya ha padecido la enfermedad y por tanto es inmune.

Tratamientos

No existe un tratamiento específico para la rubéola. La actuación de los especialistas durante la enfermedad suele centrarse en el control de los síntomas y va dirigida a mitigar la fiebre y el malestar general, como si se tratara de un proceso gripal. Se recomienda reposo y el aislamiento del paciente para evitar nuevos contagios. Hay que acudir al pediatra si el niño con rubéola respira con dificultad o la tos dura más de cuatro o cinco días. Se administran antibióticos en caso de infecciones bacterianas (otitis o neumonía).

Otros datos

Los problemas más graves asociados a la rubéola suelen presentarse en mujeres embarazadas que contraen la enfermedad durante la gestación o en los meses anteriores al embarazo. En estos casos existe un alto riesgo de que el feto se contagie y desarrolle el Síndrome Congénito de la Rubéola, que puede provocar la aparición de defectos congénitos en el niño, tales como pérdida de visión y ceguera, pérdida de audición, patologías cardíacas, retraso y parálisis cerebral o dificultades a la hora de empezar a caminar.
Los bebés con este síndrome pueden presentan bajo peso al nacer, diarrea, neumonía y meningitis. Las primeras 8 semanas de gestación son las más susceptibles para el feto, con mayor probabilidad de defectos congénitos, ya que es una época muy importante del crecimiento fetal, con numerosos órganos y sistemas en pleno desarrollo, que pueden verse dañados por el virus.
Los especialistas recomiendan que las mujeres en edad fértil estén inmunizadas contra la enfermedad para evitar el Síndrome Congénito de la Rubéola, o someterse a un análisis antes del embarazo con el fin de detectar la presencia de anticuerpos (defensas) contra la rubéola. La vacuna no se debe administrar durante el embarazo ni en los tres meses anteriores a la concepción y las mujeres embarazadas deben mantenerse alejadas de personas con rubéola.

Estrias, ¿Qué son?


Son áreas irregulares de piel que se asemejan a bandas, franjas o líneas y se observan cuando una persona crece, aumenta de peso rápidamente o tiene ciertas afecciones o enfermedades.
Comúnmente se denominan estrías gravídicas o marcas por estiramiento.

Consideraciones generales

Las estrías pueden aparecer como consecuencia del rápido estiramiento de la piel y, a menudo, se las asocia con el agrandamiento del abdomen que se presenta durante el embarazo. Se puede dar también en niños que se vuelven obesos rápidamente. Igualmente, se pueden encontrar en niños y niñas durante el rápido crecimiento en la pubertad. La localización más común de las estrías se encuentra en las mamas, las caderas, los muslos, los glúteos, el abdomen y los costados.
Las estrías aparecen en forma de líneas paralelas de piel rojizas, brillantes y delgadas que después de algún tiempo se tornan blancuzcas y con apariencia de cicatriz. Dichas líneas pueden ser ligeramente profundas y presentar una textura diferente de la piel normal.
Las estrías también pueden presentarse como resultado de una formación anómala de colágeno o como resultado de medicamentos o substancias químicas que interfieren con la formación del mismo. De la misma manera, pueden estar asociadas con el uso prolongado de compuestos de cortisona, diabetes, enfermedad de Cushing y el período de posparto.

Causas comunes

Cuidados en el hogar

No existe ningún cuidado específico para las estrías gravídicas. Estas marcas suelen desaparecer después de que desaparece el factor que causó el estiramiento de la piel. Las cremas y bálsamos que se dice que previenen las estrías gravídicas durante el embarazo son de muy poco valor.
El hecho de evitar el rápido aumento de peso. ayuda a reducir las estrías causadas por la obesidad.

Se debe llamar al médico si

Si las estrías aparecen sin una causa obvia como embarazo o rápido aumento de peso, se debe consultar con el médico.

Lo que se puede esperar en el consultorio médico

El médico examinará a la persona y le hará preguntas acerca de los síntomas, como:
  • ¿Es ésta la primera vez que ha presentado estrías?
  • ¿Cuándo las notó por primera vez?
  • ¿Qué medicamentos ha tomado?
  • ¿Ha usado una crema para la piel a base de cortisona?
  • ¿Qué otros síntomas también se presentan?
Si las estrías no son causadas por cambios físicos normales, se pueden hacer exámenes.

Los tampones que tienen que ver con el sindrome de shock toxico

Es una enfermedad grave que implica fiebre, shock y problemas con el funcionamiento de algunos órganos corporales.

Causas, incidencia y factores de riesgo

El síndrome de shock tóxico es causado por una toxina producida por ciertos tipos de las bacterias estafilococos. Un síndrome similar, llamado síndrome tóxico similar al shock (TSLS, por sus siglas en inglés), puede ser causado por las bacterias estreptococos.
Aunque los primeros casos del síndrome de shock tóxico descritos comprometían principalmente a mujeres que estaban utilizando tampones durante sus períodos (menstruación), hoy en día menos de la mitad de los casos actuales están asociados con ese hábito. Este síndrome también puede ocurrir con infecciones cutáneas, quemaduras y después de cirugía. La enfermedad también puede afectar a niños, mujeres posmenopáusicas y hombres.
Los factores de riesgo abarcan:
  • Parto
  • Infección por Staphylococcus aureus (S. aureus), comúnmente llamada infección estafilocócica
  • Cuerpos extraños o tapones (como los que se utilizan para detener el sangrado nasal)
  • Menstruación
  • Cirugía
  • Uso de tampón vaginal, particularmente si se deja por mucho tiempo
  • Uso de anticonceptivos de barrera, como un diafragma o la esponja vaginal
  • Infección de una herida después de cirugía

Síntomas

  • Confusión
  • Diarrea
  • Malestar profundo (indisposición)
  • Dolores de cabeza
  • Fiebre alta y acompañada en algunas ocasiones por escalofríos
  • Hipotensión
  • Dolores musculares
  • Náuseas y vómitos
  • Insuficiencia en órganos (generalmente los riñones y el hígado)
  • Enrojecimiento de ojos, boca y garganta
  • Crisis epilépticas o convulsiones
  • Erupción roja y generalizada que se asemeja a una quemadura solar: la descamación de la piel ocurre una o dos semanas después de la erupción, especialmente en las palmas de las manos o plantas de los pies

Signos y exámenes

No existe un examen particular de diagnóstico para el síndrome de shock tóxico.
El diagnóstico se basa en varios criterios: fiebre, presión arterial baja, erupción descamativa después de 1 a 2 semanas y problemas con el funcionamiento de al menos tres órganos.
En algunos casos, los hemocultivos pueden ser positivos para la proliferación de S. aureus.

Tratamiento

Se extraerá cualquier material extraño, como tampones, esponjas vaginales o tapones nasales. Asimismo, se drenarán los sitios de infección (como heridas quirúrgicas).
El objetivo del tratamiento es mantener las funciones corporales importantes, lo cual puede comprender:
  • Antibióticos para cualquier infección (se pueden administrar por vía intravenosa)
  • Diálisis (si se presentan problemas renales graves)
  • Líquidos intravenosos
  • Métodos para controlar la presión arterial
  • La gammaglobulina intravenosa puede ayudar en casos graves

Expectativas (pronóstico)

El síndrome del shock tóxico puede ser mortal hasta en el 50% de los casos y puede reaparecer en aquellas personas que sobreviven.

Complicaciones

Situaciones que requieren asistencia médica

El síndrome del shock tóxico es una emergencia médica. Busque atención médica inmediata si presenta una erupción, fiebre y se siente enferma, en particular durante la menstruación y el uso de tampones, o si usted ha tenido una cirugía reciente.

Prevención

El síndrome del shock tóxico menstrual se puede prevenir evitando el uso de tampones altamente absorbentes. Usted puede disminuir el riesgo cambiando los tampones con más frecuencia y utilizando tampones sólo de vez en cuando (no regularmente) durante la menstruación.

martes, 15 de marzo de 2011

Impetigo


El impétigo es una infección cutánea superficial causada por dos tipos de bacterias, tanto por estreptococos como por estafilococos.
El impétigo es una enfermedad muy contagiosa que se ve con frecuencia en los niños sobretodo en la edad preescolar  y provoca una infección cutánea superficial. Ésta se manifiesta por costras amarillas o doradas que generalmente aparecen en el rostro, la parte superior del tronco y los brazos. En los niños además con mucha frecuencia se compromete la nariz.
En resumen es  una enfermedad bacteriana que se caracteriza por lesiones cutáneas superficiales que forman una costra.

¿Cómo se produce? El impétigo es una infección frecuente de la piel que es más común en niños, especialmente si están expuestos a condiciones higiénicas deficientes y hacinamiento mientras que en los adultos, puede seguir a otros trastornos de la piel. El impétigo puede estar precedido por una infección de vías respiratorias superiores reciente, como un resfriado u otra infección viral. Es similar a la celulitis, pero más superficial, infecta la piel superficial (capas superiores) con estreptococo ,estafilococo o ambos.

Desde donde vienen los gérmenes?

La piel normalmente tiene muchos tipos de bacterias sobre ella, pero cuando está intacta es una barrera efectiva para evitar que éstas entren y crezcan en el organismo. Cuando hay una ruptura en la piel, las bacterias pueden ingresar al cuerpo y crecer, causando inflamación e infección. Dicha ruptura en la piel puede ocurrir por picaduras de insectos, mordeduras de animales, mordeduras humanas, otras heridas o traumas en la piel. El impétigo se puede presentar en la piel donde no hay trauma ni lesión visible.

El impétigo comienza con una úlcera roja con picazón que se ampolla, supura y finalmente se cubre con una costra que se adhiere firmemente. Tiende a crecer y a propagarse y es contagioso. La infección se lleva en el líquido que supura de las ampollas. Muy pocas veces, el impétigo puede formar úlceras más profundas en la piel.

¿Cuáles son los síntomas?


Lesiones cutáneas en la cara, los labios o en los brazos o piernas que se diseminan a otras áreas. Por lo general, esta lesión comienza como un grupo de ampollas pequeñas que revientan, seguido de supuración y formación de una costra gruesa, color café o miel, que se adhiere firmemente a la piel.
*Picazón en la ampolla:
*llena de un líquido color miel
*supuración y formación de costra
*Erupción (puede comenzar como un solo punto, pero si los niños se rascan esa zona, puede esparcirse a otras áreas).
*En niños lactantes una sola o posiblemente múltiple ampolla llena de pus, fáciles de estallar, que cuando se rompen dejan una base roja, como en carne viva.
*Ganglios en las zonas vecinas: los ganglios linfáticos cerca de la infección pueden estar inflamados.

¿Cómo se hace el diagnostico? El diagnóstico se fundamenta en primer lugar en la apariencia de la lesión cutánea. En un cultivo de la piel o de la lesión de la mucosa crecen por lo general estreptococos o estafilococos.

¿Cuál es el tratamiento? Los objetivos del tratamiento son curar la infección y aliviar los síntomas.
Una infección leve se trata con antibióticos tópicos prescritos por el médico. Un agente tópico común sería una crema antibacteriana Con frecuencia se prescriben antibióticos orales que hacen desaparecer las lesiones rápidamente;
Para remover las costras y el drenaje se recomienda lavar la piel varias veces al día preferiblemente con un jabón antibacteriano o antiséptico.
Se debe prevenir la diseminación de la infección teniendo en cuenta las siguientes recomendaciones: usar una toalla de manos limpia cada vez, no compartir las toallas, las prendas de vestir con los otros miembros de la familia, lavar las manos minuciosamente después de tocar las lesiones de la piel.
Las úlceras del impétigo se curan lentamente y muy rara vez cicatrizan. La tasa de curación es muy alta, pero con frecuencia vuelven en niños pequeños.

¿Se puede complicar? *La diseminación de la infección a otras partes del cuerpo es común.
*Presencia de múltiples lesiones de impétigo en los niños.
*Una infección general a la riñones: glomérulo nefritis post-estreptocócica) es de rara ocurrencia.
*Daño permanente en la piel, cicatrización (también extremadamente raro).
*Pueden sobrevenir linfangitis, adenitis, erisipela o celulitis

¿Como prevenirlo? Una buena salud e higiene general ayudan a prevenir la infección. Las abrasiones menores o áreas de piel lesionada se deben limpiar minuciosamente con agua y jabón y si se desea, se puede aplicar un agente antibacteriano suave.
El impétigo es contagioso, por lo tanto se debe evitar el contacto con el drenaje de las lesiones.

Existe otra forma de presentación del impétigo denominada Impétigo Ampollar o Buloso
Su agente es el famoso Estafilococos Dorado. Es una enfermedad producida por una toxina de la bacteria que produce una verdadera separación de las capas formando Ampollas Es habitualmente esporádica pero pueden ocurrir pequeños brotes.
Clínicamente estas ampollas de mayor tamaño que el impétigo vulgar duran un poco mas y pueden tomar extensiones de la piel. Su duración es alrededor de dos o tres días y están rodeadas por un halo rojizo. Su contenido en un comienzo es transparente pero luego se torna turbio. Al romperse la ampolla queda como barnizada con este producto que se torna mas denso.
La generalización de la potente toxina cuadro de gravedad extrema.

martes, 15 de febrero de 2011

HERPES ZOSTER





HERPES ZOSTER

Es una erupción vesicante y dolorosa debido al virus varicella-zoster, que ocasiona la varicela.
Ver también: síndrome de Ramsay Hunt

Causas

Después de que uno contrae varicela, el virus permanece inactivo (latente) en ciertos nervios del cuerpo. La culebrilla o zóster ocurre después de que el virus se reactiva en estos nervios después de muchos años.
La razón por la cual el virus se vuelve activo de nuevo no es clara. Con frecuencia, sólo se presenta un ataque.
El zóster se puede desarrollar en cualquier grupo de edad, pero uno tiene mayor probabilidad de desarrollar la afección si:
  • Tiene más de 60 años
  • Le dio varicela antes de cumplir un año
  • Su sistema inmunitario está debilitado por medicamentos o enfermedad
Si un adulto o un niño tiene contacto directo con la erupción por herpes zóster y no ha tenido varicela de niño o no ha recibido la vacuna contra esta enfermedad, puede desarrollar varicela en lugar de zóster.

Síntomas

El primer síntoma generalmente es un dolor en un solo lado, hormigueo o ardor. El dolor y el ardor pueden ser intensos y generalmente se presentan antes de que aparezca cualquier erupción.
En la mayoría de las personas, se forman parches en la piel, seguidos de pequeñas ampollas.
  • Las ampollas se rompen, formando pequeñas úlceras que comienzan a secarse y formar costras, las cuales se caen en dos a tres semanas. La cicatrización es rara.
  • La erupción generalmente involucra un área estrecha de la columna alrededor de la parte frontal de la región ventral o el pecho.
  • La erupción puede comprometer la cara, los ojos, la boca y los oídos.
Los síntomas adicionales pueden abarcar:
  • Dolor abdominal
  • Escalofríos
  • Dificultad para mover algunos de los músculos en la cara
  • Caída del párpado (ptosis)
  • Fiebre y escalofríos
  • Sensación de malestar general
  • Lesiones genitales
  • Dolor de cabeza
  • Hipoacusia
  • Dolor articular
  • Pérdida del movimiento del ojo
  • Inflamación de los ganglios linfáticos
  • Problemas en el sentido del gusto
  • Problemas de visión
También se puede presentar dolor, debilidad muscular y una erupción que involucra diferentes partes de la cara si el zóster afecta a un nervio en el rostro. Ver: síndrome de Ramsay Hunt.

Pruebas y exámenes

El médico puede hacer el diagnóstico examinando la piel y haciendo preguntas acerca de la historia clínica.
En muy pocas ocasiones se necesitan exámenes, pero puede abarcar la toma de una muestra de piel para ver si está infectada con el virus que causa el herpes zóster.
Los exámenes de laboratorio pueden mostrar un aumento en los glóbulos blancos y anticuerpos contra el virus de la varicela, pero no pueden confirmar que la erupción se deba al zóster.

Tratamiento

El médico puede prescribir un medicamento que combate el virus, llamado antiviral, el cual ayuda a disminuir el dolor y las complicaciones, al igual que acorta el curso de la enfermedad. Se puede usar aciclovir, famciclovir y valaciclovir.
Los medicamentos deben comenzarse al cabo de 24 horas de sentir el dolor o el ardor y, preferiblemente, antes de que aparezcan las ampollas. Por lo general, los medicamentos se suministran en forma de pastillas, en dosis mucho mayores que las recomendadas para el herpes simple o herpes genital. Es posible que algunas personas necesiten que se les administre el medicamento por vía intravenosa (IV).
Los medicamentos antinflamatorios fuertes llamados corticosteroides, como la prednisona, pueden emplearse para reducir la inflamación y el riesgo de dolor continuo. Estos fármacos no funcionan en todos los pacientes.
Otros medicamentos pueden abarcar:
  • Antihistamínicos para reducir la picazón (tomados por vía oral o aplicados en la piel)
  • Analgésicos
  • Zostrix, una crema que contiene capsaicina (un extracto del ají picante) que puede reducir el riego de neuralgia posherpética
Se pueden utilizar compresas húmedas y frías para reducir el dolor. Los baños calmantes y lociones, como los baños de avena coloidal, baños de fécula o la loción de calamina pueden ayudar a aliviar la picazón y la molestia.
Asimismo, se recomienda el reposo en cama hasta que baje la fiebre.
Se debe mantener la piel limpia y no reutilizar artículos contaminados. Igualmente, los artículos no desechables deben lavarse en agua hirviendo o deben desinfectarse antes de reutilizarse. La persona puede requerir aislamiento mientras las lesiones estén supurando para evitar infectar a otras personas que nunca hayan tenido varicela, especialmente las mujeres embarazadas.

Pronóstico

El herpes zóster normalmente desaparece en dos o tres semanas y muy rara vez reaparece. Si el virus afecta los nervios que controlan el movimiento (nervios motores), se puede presentar debilidad o parálisis temporal o permanente.
Algunas veces, el dolor en el área donde ocurrió el zóster puede durar de meses a años. Ver: neuralgia posherpética.

Posibles complicaciones

Algunas veces, el dolor en el área donde el herpes zóster ocurrió puede durar meses o años. Este dolor se denomina neuralgia posherpética y se presenta cuando los nervios han resultado dañados después de un brote de herpes zóster. El dolor va de leve a muy intenso y es más probable que ocurra en personas mayores de 60 años.
Otras complicaciones pueden abarcar:
  • Otro ataque de herpes zóster
  • Ceguera (si se presentan lesiones en los ojos)
  • Sordera
  • Infección, incluyendo encefalitis o sepsis (infección de la sangre) en personas con sistemas inmunitarios debilitados
  • Infecciones cutáneas bacterianas
  • Síndrome de Ramsay Hunt si el herpes zóster afectó los nervios en la cara

Cuándo contactar a un profesional médico

Consulte con el médico si tiene síntomas de herpes zóster, particularmente si no tiene defensas o si los síntomas persisten o empeoran. El herpes zóster que afecta el ojo puede llevar a ceguera permanente si uno no recibe cuidados médicos urgentes.

Prevención

Evite el contacto con salpullidos y ampollas de personas con herpes zóster o varicela si nunca ha sufrido de varicela o no ha recibido la vacuna contra esta enfermedad.
Hay disponibilidad de una vacuna contra el herpes zóster y es diferente de la vacuna contra la varicela. Los adultos mayores que reciben la vacuna contra el herpes zóster tienen menos probabilidad de tener complicaciones por esta enfermedad. Los adultos mayores de 60 años deben recibir la vacuna contra el herpes zóster como parte de los cuidados médicos de rutina.
Ver: vacuna contra la varicela

Nombres alternativos

Herpes zóster o culebrilla

HERPES SIMPLE




HERPES SIMPLE
 Es una infección viral que afecta principalmente la boca o el área genital.

Causas

Existen dos cepas diferentes del virus del herpes simple:
  • El virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1) que usualmente está asociado con las infecciones de los labios, la boca y la cara. Es el herpes simple más común y muchas personas lo desarrollan en la niñez. Con frecuencia, causa lesiones dentro de la boca como herpes labial (herpes febril) o infección ocular (especialmente la conjuntiva y la córnea) y también puede llevar a infección del revestimiento del cerebro (meningoencefalitis). Se trasmite por contacto con saliva infectada. En la adultez, del 30 al 90% de las personas tendrá anticuerpos contra el VHS-1. La probabilidad de una infección en la niñez es más alta en personas de estrato socioeconómico bajo.
  • El virus del herpes simple tipo 2 (VHS-2) se transmite por lo general, aunque no siempre, por contacto sexual. Los síntomas abarcan úlceras o llagas en los genitales. Sin embargo, algunas personas con VHS-2 son asintomáticos. Hasta el 30% de los adultos en los Estados Unidos presentan anticuerpos contra este virus. La infección cruzada de los virus tipo 1 y 2 puede ocurrir a causa del contacto orogenital. Es decir, usted puede desarrollar el herpes genital en la boca y el herpes oral en su área genital.
Una infección de un dedo de la mano, llamada panadizo herpético, es otra forma de herpes que, por lo general, afecta a los médicos que están expuestos a la saliva durante los procedimientos. Algunas veces, los niños también pueden contraer la enfermedad.
El virus del herpes puede infectar al feto y causarle anomalías. Una mujer que esté infectada con herpes puede trasmitirle el virus a su bebé durante el parto vaginal, especialmente si la madre tiene una infección activa en el momento de dar a luz. Sin embargo, del 60 al 80% de las infecciones por VHS adquiridas por recién nacidos ocurren en mujeres que no tienen síntomas de dicha infección o antecedentes familiares de infección genital por VHS.
Es posible que el virus se transmita incluso cuando no haya ningún síntoma o úlcera visible. Dos tercios de las personas con infección genital por VHS no presentan recurrencias de sus síntomas y un tercio tiene tres o más recurrencias (brotes) por año.
El VHS nunca se elimina del cuerpo; permanece latente y puede reactivarse, lo que causa síntomas.

Síntomas

  • Ampollas o úlceras, con mayor frecuencia en la boca, los labios, las encías o los genitales
  • Inflamación de los ganglios linfáticos en el cuello o en la ingle (por lo general, sólo en el momento de la infección inicial)
  • Herpes febril
  • Fiebre, especialmente durante el primer episodio
  • Lesiones genitales: primero puede haber una sensación de ardor u hormigueo
  • Úlceras bucales

Pruebas y exámenes

Muchas veces, los médicos pueden deducir si la persona tiene una infección por herpes simple con solo mirar las lesiones; sin embargo, se pueden ordenar algunos exámenes para confirmar el diagnóstico. Estos exámenes abarcan:
  • Examen de sangre para anticuerpos de VHS (serología)
  • Examen de anticuerpos fluorescentes directos (AFD) de células tomadas de una lesión
  • Cultivo viral de la lesión

Tratamiento

Algunos casos son leves y pueden no necesitar tratamiento.
Las personas que tienen brotes prolongados o severos (especialmente si es el primer episodio), las que tienen problemas del sistema inmunitario o aquellas con recurrencias frecuentes se beneficiarán de medicamentos antivirales como aciclovir (Zovirax), famciclovir (Famvir) y valaciclovir (Valtrex).
Las personas que tienen recurrencias severas o frecuentes de herpes genital o herpes oral pueden optar por seguir tomando medicamentos antivirales para reducir la frecuencia y severidad de dichas recurrencias.

Grupos de apoyo

Los grupos de apoyo y el servicio de citas y encuentros con personas que tengan el mismo problema están disponibles para las personas con herpes genital.

Pronóstico

Las lesiones orogenitales generalmente sanan por sí solas en un lapso entre 7 y 10 días. La infección puede ser más severa y durar mucho más tiempo en personas que tengan una afección que debilite su sistema inmunitario.
Una vez que ocurre la infección, el virus se disemina a las neuronas y permanece en el organismo de la persona por el resto de su vida. El virus se puede reactivar de vez en cuando y ocasionar síntomas o brotes. Las recurrencias se pueden desencadenar por el exceso de luz solar, fiebre, estrés, enfermedad aguda y medicamentos o afecciones que debiliten el sistema inmunitario (como cáncer, VIH/SIDA o el uso de corticosteroides).

Posibles complicaciones

  • Eccema herpetiforme (herpes generalizado a través de la piel)
  • Encefalitis
  • Infección de los ojos, queratoconjuntivitis
  • Infección de la tráquea
  • Meningitis
  • Neumonía
  • Infección prolongada y severa en personas inmunodeficientes

Cuándo contactar a un profesional médico

Consulte con el médico si desarrolla síntomas que se parecen a una infección por herpes. Hay muchas afecciones diferentes que pueden causar lesiones similares (especialmente en el área genital).
En caso de tener antecedentes de infección por herpes y desarrollar lesiones similares, coméntele al médico si éstas no mejoran después de 7 a 10 días o si tiene una afección que debilite el sistema inmunitario.

Prevención

La prevención del herpes simple es difícil, ya que las personas pueden diseminar el virus incluso sin tener síntomas de un brote activo.
El hecho de evitar el contacto directo con una lesión abierta reducirá el riesgo de infección.
Las personas que presentan herpes genital deben evitar el contacto sexual cuando tienen lesiones activas. Un comportamiento sexual más seguro, incluyendo el uso de condones, también puede reducir el riesgo de infección.
Las personas con lesiones activas por VHS también deben evitar el contacto con recién nacidos, niños con eccema o personas con sistemas inmunitarios debilitados, ya que estos grupos presentan un riesgo más alto de contraer enfermedad más severa.
Para disminuir el riesgo de infectar a los recién nacidos, es recomendable practicar un parto por cesárea a las mujeres que tengan una infección activa por VHS en el momento de dar a luz.